“Mamá, todo dice “Puede contener”, qué voy a comer?” escuché en el pasillo del supermercado, cerca de la góndola de snacks.
No pude evitar darme vuelta. La empatía hizo todo lo demás.
Supe que se llamaba Anna, que tenía 15 años y que desde los 6 repetía como un mantra “maní – frutos secos – mariscos” cada vez que comía fuera de su casa.
Que esa lista había sido más larga años atrás, que no le gustaban las fiestas de cumpleaños y que los viajes y las vacaciones familiares siempre habían estado teñidos de ansiedad y miedo.
“Siempre fui la niña que dejaba el muffin en la mesa, aunque le juraran que no tenía nueces”, me dijo con angustia.
“En el último campamento de verano del colegio comí la mitad de una galleta. Casi me muero en el camino a la sala de emergencias” me dijo poniéndose muy seria. “Te juro que miré el rótulo, siempre lo hago, no decía que podía tener nueces”.
Recordé que los adolescentes son el grupo más vulnerable a sufrir reacciones alérgicas y anafilaxia.
Anhelan ser aceptados por sus pares. Pero la alergia los hace diferentes.
Anhelan la inclusión. Pero sufren bullying por su condición y esto exacerba todos los riesgos.
Su mamá me miró a los ojos. Vi todos los años de miedo, de ansiedad, de preocupación. Comprendí entonces su anhelo más profundo: poder algún día, descansar.
Las abracé, ahí, en el medio de la góndola. Ya no éramos desconocidas.
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Las alergias alimentarias reducen significativamente la calidad de vida de los pacientes y de su entorno. Generan ansiedad, frustración, estrés, depresión y aislamiento social. La raíz de esta tensión emocional está en la dificultad real del manejo de la enfermedad.
Quienes padecen alergias asumen una gran cantidad de responsabilidades adicionales, incluso desde que son muy chiquitos.
Te pido que cierres los ojos.
Y que imagines por un momento a un niño de 3 años, que al tiempo que comienza el jardín de infantes, tiene que aprender a evaluar dónde existe riesgo, cómo reaccionar ante una emergencia casi inevitable y cómo afrontar los sentimientos de inseguridad y miedo permanentes.
Imagina que, además, tiene la obligación de educar a los demás, comunicar su condición y mantenerse firme ante los malentendidos, las bromas y las objeciones que muchas veces recibe de sus compañeros y hasta de sus cuidadores.
Desde la industria tenemos la oportunidad de hacer un poco más fácil la vida de Anna, de su mamá, y de todas las personas alérgicas.
Si podemos:
Diagnosticar la complejidad alergénica
Diseñar la estrategia para la gestión
Identificar los peligros del proceso
Aplicar las medidas de control necesarias
Entonces el rótulo será el reflejo de nuestro compromiso con los consumidores. Y nuestra mejor forma de contribución.
Porque Anna, y todos los chicos, merecen comer pastel…
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En el artículo anterior vimos los requisitos de rotulación de la legislación argentina.
En este artículo – entrega n°2 de la saga, voy a contarte los detalles de la legislación de otros países.
Allá vamos!
Declaración de alérgenos en el rótulo
En el artículo anterior vimos que la legislación argentina admite sólo una forma de declarar la presencia de alérgenos: “Contiene….”.
En otros países, tales como Chile y Estados Unidos, se admiten varias expresiones:
Caso 1: En la misma lista de ingredientes
Ejemplo: Enriched flour (wheat flour, malted barley, niacin, reduced iron, thiamin mononitrate, riboflavin, folic acid), sugar, partially hydrogenated soybean oil, and/or cottonseed oil, high fructose corn syrup, whey (milk), eggs, vanilla, natural and artificial flavoring) salt, leavening (sodium acid pyrophosphate, monocalcium phosphate), lecithin (soy), mono-and diglycerides (emulsifier)
Caso 2: A continuación de la lista de ingredientes bajo el título “Contiene….”
Ejemplo: Contains Wheat, Milk, Egg, and Soy
Australia y Nueva Zelanda, por su parte, requieren que se indique la lista de alérgenos luego de la expresión “Contains (Contiene)….”
Los países de Europa, en cambio, requieren que los alérgenos se incluyan y se enfaticen dentro de la lista de ingredientes, usando una fuente, estilo, color de fondo diferente o negrita.
Uso del rotulado precautorio:
En la mayoría de los países que cuentan con regulación de alérgenos, el uso de la frase precautoria es voluntaria por parte de los elaboradores, en contraposición con lo que indica la legislación argentina, donde es mandatorio.
Estados Unidos, Nueva Zelanda, Canadá, entre otros, admiten diferentes expresiones para el rotulado precautorio (PAL) e incluso admiten, en un mismo rótulo, más de una expresión:
“Puede contener…”, “Contiene trazas de….”; “Producido en una planta que también elabora….”
Mirá este ejemplo:
Por su lado, los países de Europa indican que los elaboradores pueden elegir entre las siguientes expresiones:
“may contain x” (“Puede contener X”)
“not suitable for consumers with a x allergy” (“No apto para consumidores con una alergia a X”)
“Los consumidores alérgicos encuentran que la información sobre alérgenos es difícil de interpretar. Recomiendan el uso de una sola forma de redacción del etiquetado precautorio” concluye un estudio realizado por la universidad de Utrecht (Países Bajos), sobre una muestra de 200 consumidores con y sin alergias alimentarias y cuyo objetivo fue cuantificar la confusión asociada al rotulado precautorio en los países que admiten múltiples expresiones.
Personalmente creo que las reglamentaciones que restringen las expresiones posibles para el rotulado de alérgenos resultan beneficiosas para los consumidores alérgicos, ya que resultan más claras, fáciles de interpretar e internalizar y no admiten ambigüedades.
¿Qué podés hacer hoy mismo para pasar a la acción?
Si sos líder de Calidad o consultor y querés mejorar la rotulación de tus productos te propongo:
Relevar si los rótulos de tus productos declaran correctamente los alérgenos según los requisitos de todos los países en los que se comercializan. Tenés una guía en este artículo y podés complementar con el artículo anterior.
En caso que debas hacer ajustes, planificálos para el próximo cambio de artes. Si advertís que tu producto puede constituir un riesgo para los consumidores alérgicos, podés subsanar los desvíos en la rotulación mediante ink-jet u otros medios que aseguren la inalterabilidad, hasta que se puedan modificar los artes.
Actualizá tu documentación interna para asegurar que los nuevos productos estén correctamente rotulados en materia de alérgenos.
Espero que esta información te aporte valor, que para mí significa que puedas mejorar tu día a día, que la puedas llevar a la práctica y te ayude a simplificar formas y procesos.
Que tengas un gran fin de semana!
Un abrazo,
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Referencias consultadas para este artículo:
REGLAMENTO SANITARIO DE LOS ALIMENTOS DTO. N° 977/76 – Chile (Actualización de 02-02-2021) – Art. 107
Food Allergen Labeling And Consumer Protection Act of 2004 Questions and Answers
Australia New Zealand Food Standards Code – Standard 1.2.3
Food Standards Agency – Packing and Labelling / Precautionary Allergen Labelling
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